19 de agosto de 2025

AIKONIC

Artesanía innovadora del Jura suizo

En 2016, Maurice Lacroix lanzó el AIKON, un reloj urbano cuya colección se ha convertido en la más vendida de la empresa. Ahora, la marca de Franches-Montagnes ha creado una nueva gama de relojes urbanos que comparte un parecido familiar con el AIKON, pero repleta de "innovación creativa" o "IC", como dirían en la Manufactura. La nueva colección AIKONIC incorpora materiales y tecnología de vanguardia. El AIKONIC, un producto del Jura suizo magistralmente elaborado en la Manufactura de la marca en Saignelégier, integra algunos componentes locales y, en línea con su filosofía, ofrece una excelencia accesible.

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En 2016, Maurice Lacroix lanzó el AIKON, un reloj urbano cuya colección se ha convertido en la más vendida de la empresa. Ahora, la marca de Franches-Montagnes ha creado una nueva gama de relojes urbanos que comparte un parecido familiar con el AIKON, pero repleta de "innovación creativa" o "IC", como dirían en la Manufactura. La nueva colección AIKONIC incorpora materiales y tecnología de vanguardia. El AIKONIC, un producto del Jura suizo magistralmente elaborado en la Manufactura de la marca en Saignelégier, integra algunos componentes locales y, en línea con su filosofía, ofrece una excelencia accesible.

Una esfera única con un toque local

El nuevo AIKONIC, siendo el éxito de la colección, es la máxima expresión de AIKON. La colección, que comparte un parecido familiar con el AIKON, incorpora "innovación creativa". Este término, abreviado como "IC", hace referencia al uso de nuevos materiales para la caja y la esfera, a la incorporación de un nuevo movimiento ultrarrefinado y a la introducción del ingenioso sistema de cambio rápido ML patentado.

El AIKONIC cuenta con una esfera de carbono, pero, con una diferencia. La mayoría de las estructuras de carbono están formadas por hilos de fibra de carbono entrelazados que se disponen en ángulo para crear tejidos con patrones. Sin embargo, la esfera de carbono del AIKONIC incorpora numerosas fibras que se extienden de la parte superior a la inferior en una sola dirección y se ven como líneas grises y negras. Como parte del proceso de fabricación de la esfera, la disposición de las fibras de carbono siempre será ligeramente diferente, lo que dará como resultado una apariencia única en cada esfera. Normalmente, las esferas de carbono son exclusivas de la Alta Relojería. Sin embargo, Maurice Lacroix ha democratizado este tipo de esferas. Para crear la esfera de carbono del AIKONIC, la marca amplió su horizonte más allá de la industria relojera y colaboró con una empresa especializada situada a unos 40 km de Saignelégier, una decisión coherente con el deseo de la Maison de crear relojes con un marcado carácter local.

La máxima expresión de AIKON

La caja, un lienzo para nuevos materiales

Al ver por primera vez el AIKONIC, los amantes del AIKON reconocerán inmediatamente los seis brazos de doble ancho que adornan el bisel, un detalle que apareció por primera vez en el AIKON inaugural de 2016. Estos brazos han demostrado ser una fuente de inspiración que influyó en el diseño de las agujas de las horas y los minutos, los índices y la corona. La corona también cuenta con un agarre táctil que facilita su manipulación y, junto con el bisel, está hecha de cerámica mate, un material resistente a los arañazos que no pierde su color con el paso de los años.

La caja combina superficies pulidas y con cepillado vertical que aportan contraste y una notable sensación de estilo, mientras que la correa se une a la caja mediante elementos brillantes. Los laterales de la caja están dotados de biseles variables (que aumentan en tamaño) que pueden jugar con la luz, lo que aumenta su percepción de calidad. Para garantizar la máxima legibilidad de la esfera, el cristal de zafiro cuenta con un revestimiento antirreflectante mejorado. Aplicado a ambos lados del cristal de zafiro, este tratamiento ofrece una transmisión de la luz superior y una mayor resistencia al agua salada.

El sistema de cambio rápido ML patentado

El AIKONIC se presenta con una correa de caucho de estilo deportivo que cuenta con el sistema de cambio rápido ML patentado, otro ejemplo de tecnología innovadora. Este sistema permite a los usuarios retirar la pulsera para adaptar el tamaño del reloj sin utilizar ningún tipo de herramienta y sin cierres ni palancas visibles. En el punto donde la hilera central de eslabones se une al cuerpo de la caja, estos pivotan, permitiendo separar la correa del reloj. Para volver a colocar la pulsera, el usuario solo tiene que alinearla y empujarla hasta que encaje en su sitio.

El calibre ML1000

Con el deseo de crear un movimiento automático digno de su nuevo modelo de alta gama, Maurice Lacroix decidió trabajar en estrecha colaboración con Soprod, un especialista en movimientos situado a menos de 10 km de Saignelégier. El nuevo calibre ML1000 está dotado de numerosos detalles refinados, varios de los cuales son visibles a través de su fondo transparente. El puente de volante está fijado con dos tornillos, lo que proporciona una estabilidad superior y una atractiva simetría. La masa oscilante es grande, lo que aumenta la fiabilidad, y presenta un diseño calado, lo que permite ver el movimiento bellamente decorado.

El acabado incluye tornillos azulados, perlado y Côtes de Genève, que confiere un nivel de refinamiento poco habitual en este rango de precios. Más allá de su atractivo diseño, el calibre ML1000 ofrece una precisión impresionante con una media diaria de ± 4 segundos y cuenta con una prodigiosa reserva de marcha de 60 horas.